Aunque sufría y reía nunca dejó de estar jugando con el destino de su vida....

Algunas veces sus lágrimas eran tan ácidas que surcaban túneles en su blanca piel.
Algunas veces sus ojos veían ciegamente de tal forma que únicamente visualizaban la luz de su pequeño ángel.
Algunas veces sus manos no percibían la suavidad del terciopelo que limpiaba su piel el filo de una hoja escrita con sus uñas gastadas.

Algunas veces su cuerpo perdía la estabilidad de la vida que navegaba por el mundo en un trompo de colores opacamente cálidos.

Algunas veces su envoltura elástica se cubría de fríos tan intensos que se vestía de rocas y tormentas eléctricas.

Algunas veces su voz era censurada por las miradas ignorantes que dialogaba con las sombras inexistentes del mundano inmanente.

Algunas veces su mente deseaba hallar respuestas que equivocaba las notas de su composición melódica en el pentagrama de la vida.

Algunas veces miraba el sendero por el cual caminaba, buscaba su sombra y corría para que ésta no se refugiase sin el reflejo de su sólida figura.
Tantas veces anheló mutar para alterar el material genético de sus sentimientos pero ¿qué pasaría, dejaría su verdadera esencia a un costado del camino?.

Si eso pasase nunca dejará de existir la frase "algunas veces"...