Estiro mi alma, hago que ejercite los músculos que se fueron consolidando de espíritus arraigados en una sola raíz, poblados de amor, odios, vidas y muertes....

Mis sensaciones realizan abdominales para desenterrar aquello que se amontonó e hizo daño.
Los sueños no ven la hora de crecer, entonces agarran elásticos para estirarse y así alcanzar los pasos que un día un perdieron...sí, una vez empezaron a caminar y obstáculos detuvieron su andar y ellos también dejaron que eso sucediese.

¿Qué fue lo qué no vi?; ¿ qué buscaba dentro de paisajes ilusorios?

Hoy mas que nunca sé que mi ser necesita que la orquesta se escuche; se cansó de estar ensayando en silencio para no molestar.
Quiere que las putas sensaciones pobladas de timidez, de abismos cada día mas temibles, dejen de ser quienes ejecuten los instrumentos que fueron ocupando un lugar en mí.
Ellos desean ser escuchados, libres...

Basta de omisiones, de cadenas impuestas y expuestas, de temores e inseguridades...

Un mundo espera, mi mundo espera, yo espero...Espero no caer cuando todo transmute de sonido a ruido y si eso pasa el director de la orquesta estará con la batuta preparada para que todo se construya otra vez...